El portal digital estadounidense Politico, citando a fuentes familiarizadas con el asunto, informó el miércoles que Washington está considerando varias opciones ante los avances del grupo armado Talibán en Afganistán, entre ellas, la posibilidad de cerrar su embajada en Kabul.
Conforme a la publicación, la evacuación temporal de la embajada de Estados Unidos en la capital afgana a fines de este mes y la revisión del número de diplomáticos que existen en la misión diplomática se encuentran entre las otras opciones.
A su vez, el Departamento estadounidense de Estado también no descartó la posibilidad de cerrar la embajada de Estados Unidos en Kabul.
“Evaluamos diariamente las amenazas y tomamos decisiones que benefician la seguridad de nuestro personal de la embajada”, dijo un funcionario del Departamento de Estado de EE.UU., amparado en el anonimato, al mismo tiempo que señaló que la embajada norteamericana ha estado en estado de “salida ordenada” desde el pasado 27 de abril.
Afganistán es escenario de enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los talibanes que buscan hacerse con el poder. Últimamente, la crisis se ha agudizado en el país asiático en medio de la retirada de las fuerzas de Estados Unidos que a la cabeza de sus aliados invadió el territorio afgano en 2001, con el pretexto de luchar contra el terrorismo y deponer a Talibán.
El informe de Politico sale a la luz el mismo día en que un funcionario de Defensa de EE.UU., quien habló en condición de anonimato, en una entrevista con la agencia británica de noticias Reuters, alegara que los talibanes podrían ocupar la capital afgana dentro de 90 días.
Todo indica que, Estados Unidos es el primero en sentir la caída de Kabul ante el avance de Talibán, puesto que, tal y como aseguran los funcionarios afganos, las Fuerzas Armadas del país están luchando contrarreloj para retomar el control del territorio ocupado por Talibán y en esta misma línea han pedido apoyo internacional.
De hecho, según expertos, resulta imposible que el grupo armado que gobernó en Afganistán desde 1996 hasta 2001 vuelva a ascender al poder, puesto que el intento de capturar Kabul enfrentará una fuerte resistencia de los partidarios del sistema gobernante. Asimismo, Talibán afronta severos problemas internos y con otros grupos rivales que lo alejan de la sede gubernamental.
Es más, las autoridades afganas también han prometido defender la nación y seguir recuperando los territorios ocupados por Talibán. En esta misma línea, se han llevado a cabo distintas operaciones aéreas y terrestres en diferentes partes del país, causando la muerte y herida a cientos de los talibanes.
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