Se trata de Shamere Collins, a quien varios uniformados obligaron a parar y salir de su coche para que lo inspeccionaran. Pero, unos minutos después, sin encontrar algo, los policías introdujeron una bolsa de plástico negro dentro del vehículo con droga en su interior, en un supuesto intento de inculpar a la mujer.
El incidente tuvo lugar en noviembre del año pasado, pero una grabación de seguridad de unos policías fue presentada el miércoles por Josh Insley, abogado de la acusada, quien cree que el vídeo muestra que los oficiales "se involucran en lo que parece ser una incautación escenificada de narcóticos".
Tras la revelación, el Departamento de la Policía de Baltimore, en el estado estadounidense de Meryland, ha suspendido del servicio a siete agentes supuestamente acusados de fabricar pruebas contra Collins, cuyas acusaciones de drogas ya han sido retiradas.
No es la primera vez que agentes de Baltimore colocan drogas para incriminar a una persona. En julio pasado, el Departamento de Policía de la ciudad puso en marcha una investigación contra tres de sus hombres después de que apareciera en otro vídeo grabado por una cámara corporal cómo un agente plantaba drogas frente a sus compañeros en una escena del crimen para incriminar a un acusado.
bhr/ktg/krd/tas
