Según afirmó el viernes el general Raymond T. Thomas, jefe del Comando de Operaciones Especiales del Pentágono, la única justificación de Washington para desplegar sus fuerzas en suelo sirio es su lucha contra el terrorismo.
Y precisamente es por esa misma razón que EE.UU. rechaza cesar sus operaciones a pesar de la fuerte oposición del Gobierno de Damasco y su falta de efectividad, recalcó el titular castrense estadounidense en declaraciones formuladas en un foro sobre seguridad, realizado en la ciudad de Aspen, estado de Colorado (centro-oeste de EE.UU.).
Tras mostrarse muy consciente de que “la situación puede cambiar”, el general Thomas aseguró que “pronto llegará el día en el que los rusos digan: ‘¿por qué sigue EE.UU. en Siria?’ Ya están muy cerca de preguntar eso”.
Pronto llegará el día en el que los rusos digan: ‘¿por qué sigue EE.UU. en Siria?’ Ya están muy cerca de preguntar eso”, afirma el general Raymond T. Thomas, jefe del Comando de Operaciones Especiales del Pentágono.
A este respecto, sostuvo que “aunque teníamos toda la razón para entrar en Siria, si los rusos deciden jugar esta carta cuando nos queramos quedar, no podremos hacerlo. Ellos sí que podrán hacerlo”.
El Gobierno de EE.UU. tiene desplegados, mayormente en el norte y el sur del territorio sirio, cientos de militares y vehículos blindados con el fin apoyar a sus aliados, es decir, a las fuerzas kurdas y a los elementos rebeldes; mientras que sus cazas han llegado a bombardear posiciones del Ejército sirio.
Damasco y sus aliados en la lucha contra el terrorismo han condenado esta presencia de las fuerzas estadounidenses resaltando la falta de autorización del Gobierno sirio o un aval del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) en este sentido.
El viernes el canciller ruso, Serguéi Lavrov, enfatizó que cualquier movimiento estadounidense para establecer bases militares en Siria ha de recibir el permiso total de Damasco, “en respeto de la legalidad”.
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