“Resolver la desigualdad comercial entre ambos países, detener la amenaza norcoreana y reforzar los lazos entre nuestros pueblos son mis principales prioridades”, ha anunciado este lunes el nuevo embajador estadounidense en China, Terry Branstad.
En un video publicado en la plataforma digital china IQIYI, el diplomático norteamericano ha subrayado que Washington y Pekín comparten muchos de los desafíos a los que ambos deben hacer frente.
A su juicio, una relación “fuerte” entre ambas partes puede contribuir a “soluciones” en cuestiones como trabajo, sanidad, educación o envejecimiento de la población.
Con fecha anterior, Branstad se refirió a China como “un socio clave” no solo en la resolución de las tensiones en la península de Corea, sino también frente a otros retos, como las disputas en el mar de China Meridional, el tema de la ciberseguridad y de los derechos humanos.
Resolver la desigualdad comercial entre ambos países, detener la amenaza norcoreana y reforzar los lazos entre nuestros pueblos son mis principales prioridades”, ha anunciado el nuevo embajador estadounidense en China, Terry Branstad.
La península coreana vive momentos de alta tensión entre Washington y Pyongyang, desatada por el aumento de la presencia militar estadounidense en la zona, las maniobras militares conjuntas Washington-Seúl y las pruebas de misiles balísticos de Corea del Norte.
La Administración del presidente estadounidense, Donald Trump, no ha descartado la opción militar contra Pyongyang, pero ha pedido a China que le ayude a presionar al Gobierno del líder norcoreano, Kim Jong-un, que ha realizado en los últimos meses varios ensayos de misiles.
“Aunque aprecio enormemente los esfuerzos del presidente (chino) Xi (Jinping) y China para ayudar con Corea del Norte, no ha funcionado. ¡Al menos yo sé que China lo intentó!”, lamentó Trump en un tuit emitido la semana pasada.
Corea del Norte reivindica con insistencia que el desarrollo de armas blinda su estrategia de defensa ante la postura hostil de Washington y los movimientos belicistas estadounidenses. Además advierte de que atacará posiciones de EE.UU. si Washington sigue con sus provocaciones.
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