Más de 3000 personas tomaron el sábado las calles de West Palm Beach, en Florida (sur del país), en protesta a las políticas del presidente estadounidense, Donald Trump. La movilización avanzó hasta las puertas de Mar-a-Lago, mansión del mandatario, según han informado este domingo medios locales.
Los manifestantes portaron pancartas en las que se podía leer “Resistamos al odio”, “Orgullosos de ser un país de inmigrantes”, “Paremos el racismo, paremos, paremos a Trump”, “Jesús fue un refugiado”, “¿Dónde está la Humanidad?”, “Impeachment a Trump”, “Libertad y Justicia para todos”. “No nos dividirá”, entre otros eslóganes.
En virtud de lo que llama "protección de EE.UU. del terrorismo", Trump ha suspendido durante 120 días el programa de acogida de refugiados de Estados Unidos y ha detenido durante 90 días la emisión de visados para ciudadanos de siete países de mayoría musulmana: Libia, Sudán, Somalia, Siria, Irak, Irán y Yemen.
Esta orden ha generado un aluvión de protestas en Estados Unidos, así como en otros países del mundo. Los que se oponen argumentan que la prohibición del mandatario estadounidense viola los derechos constitucionales de los inmigrantes y sus familiares, por específicamente atacar a los musulmanes.
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