“Ashuri se convirtió en mártir de la Revolución Islámica en enfrentamientos con los terroristas, después de desmantelar a más de 120 grupos terroristas”, ha aseverado este sábado el ministro iraní de Inteligencia, Mahmud Alavi.
Alavi, con estas palabras, aludía al soldado iraní Hassan Ashuri, que perdió la vida el pasado miércoles en una operación antiterrorista en la ciudad de Chabahar, ubicada en la provincia de Sistán y Baluchistán (sureste de Irán), en la que murieron dos terroristas y otros cinco fueron detenidos.
En el funeral de Ashuri, celebrado este lunes en su ciudad natal, Rudsar, en Guilán (norte), el ministro iraní de Inteligencia ha alabado la lucha antiterrorista del país, así como el espíritu y la moral del pueblo iraní, que se sacrifica a sí mismo para defender su país.
De igual modo, ha destacado que, en los cuatro años que él ha dirigido el Ministerio de Inteligencia, Ashuri es el único mártir dentro de las fronteras de Irán, si bien otros soldados alcanzaron el martirio fuera del país.
Ashuri se convirtió en mártir de la Revolución Islámica en enfrentamientos con los terroristas, después de desmantelar a más de 120 grupos terroristas”, ha aseverado el ministro iraní de Inteligencia, Mahmud Alavi.
Por otra parte, el ministro ha prometido a la nación persa que se esforzará aun más en la lucha contra las corrientes extremistas y el establecimiento de la seguridad en el país con la cooperación de todos los órganos, incluido el Cuerpo de los Guardianes de la Revolución Islámica de Irán (CGRI).
Ha aludido también a los ataques mortales del 7 de junio en la sede del Parlamento iraní y en el mausoleo del fundador de la República Islámica de Irán, el Imam Jomeini (P). Tal y como dijo al respecto el Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, se trató de meros “petardos” incapaces de amenazar la seguridad del país persa.
“El pueblo de Irán sigue adelante: los petardos que han lanzado hoy no van a influir en la voluntad del pueblo. Que lo sepan todos: son tan insignificantes que no podrán influir en la voluntad de la nación iraní ni de las autoridades del país”, comentó el Líder nada más ocurrir los atentados de Teherán.
Además, destacó que si la República Islámica de Irán no hubiera actuado en el epicentro de los conflictos, es decir, en Siria y en Irak, habría sufrido gran número de desafíos en su propio suelo.
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