“Los llamados de EE.UU. a la guerra y la amenaza de aplicar nuevas sanciones contra Corea del Norte (…) dan motivos adicionales para tener armas nucleares”, ha declarado la Cancillería del Gobierno norcoreano en un documento citado este viernes por la Agencia Telegráfica Central de Corea.
La Cartera ha considerado la medida como los “últimos esfuerzos de quienes están asustados” por el poderío nuclear de Pyongyang.
“Las sanciones de EE.UU. solo duplicaron el indoblegable espíritu de nuestro Ejército y pueblo, unidos en torno a su líder y su inconmensurable anhelo de autodeterminación y autodesarrollo, así como el incremento de la capacidad defensiva de Corea del Norte”, reza la misiva.
Los llamados de EE.UU. a la guerra y la amenaza de aplicar nuevas sanciones contra Corea del Norte (…) dan motivos adicionales para tener armas nucleares”, reza la misiva de la Cancillería norcoreana.
La Cancillería de Corea del Norte ha condenado también las sanciones unilaterales de las autoridades de Estados Unidos.
El país asiático volvió a ensayar el día 28 de julio otro misil balístico intercontinental, más poderoso y avanzado que el otro, que según las autoridades norcoreanas, tenía la capacidad de alcanzar todo el territorio estadounidense.
Estados Unidos a su vez, respondió al desafío norcoreano desplegando dos bombarderos estratégicos B-1B en torno a la península coreana en unas maniobras aéreas a las que se sumó Japón. Completó además, su paquete de contramedidas aprobando nuevas sanciones a Pyongyang y realizando una prueba de su sistema de Defensa Terminal de Área a Gran Altitud (THAAD, por sus siglas en inglés). La ley promulgada por el presidente de EE.UU., Donald Trump, castiga también a Irán y Rusia.
De igual forma, el Gobierno estadounidense prohibió el miércoles a sus ciudadanos viajar a Corea del Norte a partir de septiembre, y advirtió de que cualquier visita a este país, incluso turística, será delito.
El Ministerio de Exteriores norcoreano ha calificado de “sucia” la medida asegurando que Pyongyang “mantendrá abierta la puerta a todos los estadounidenses de buena fe que desean visitar Corea del Norte y conocer su realidad”.
Corea del Norte reivindica con insistencia que el desarrollo de armas blinda su estrategia de defensa ante la postura hostil de Washington y los movimientos belicistas estadounidenses.
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