"Estados Unidos sigue hablando de un diálogo incluso en este momento", cuando se han dictado sanciones, "pero no tiene sentido hablar de diálogo con precondiciones injustas y aplicando una gran presión", ha afirmado este miércoles el embajador adjunto norcoreano ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Kim in Ryong.
En declaraciones realizadas durante un debate en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) sobre la no proliferación de armas nucleares, presidido por Bolivia, el representante norcoreano ha rechazado las últimas sanciones impuestas por el CSNU contra su país, y ha dicho que este “acto mezquino y descarado más bien tendrá un efecto contrario al deseado”.
Además, ha asegurado que es un "error de cálculo fatal" por parte de los países creer que las sanciones evitarán que Corea del Norte desarrolle sus fuerzas nucleares.
Pero no tiene sentido hablar de diálogo con precondiciones injustas y aplicando una gran presión", dice el embajador adjunto norcoreano ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Kim in Ryong.
La agencia de noticias surcoreana Yonhap, citando a la directora general del Departamento de Asuntos Estadounidenses del Ministerio norcoreano de Exteriores, Choe Son Hui, anunció el pasado mes de mayo que el Gobierno de Pyongyang está dispuesto a dialogar con EE.UU. sobre su programa nuclear y de misiles si se dan las "condiciones" apropiadas.
Las tensiones entre Pyongyang y Washington se recrudecieron con el inicio del mandato del presidente de EE.UU., Donald Trump, que decretó el fin de la “paciencia estratégica” del país norteamericano respecto al programa nuclear y de misiles norcoreano, y no descartó, incluso, el recurrir a una intervención militar contra el país asiático.
Corea del Norte, a su vez, ha alertado en reiteradas ocasiones del estallido de “una guerra nuclear” en la península coreana, como posible consecuencia de lo que considera actos “hostiles” de Washington en su contra.
fdd/anz/hgn/rba