• El ensayo de un misil balístico norcoreano durante el desarrollo de unas maniobras militares en la localidad de Hwasong, noreste de Corea del Norte, 21 de julio de 2016.
Publicada: jueves, 22 de diciembre de 2016 2:31
Actualizada: viernes, 23 de diciembre de 2016 1:04

Corea del Norte lanzaría un nuevo ensayo nuclear a comienzos del 2017, coincidiendo con la investidura del electo presidente de EE.UU., según fuentes surcoreanas.

El Instituto para la Estrategia de la Seguridad Nacional de Corea del Sur (INSS, por sus siglas en inglés) ha denunciado este miércoles que Pyongyang podría elevar las tensiones, una vez más, a comienzos de 2017, con ensayos nucleares y misilísticos, mientras Donald Trump asume el poder.

“Se estima que Corea del Norte intensifique, el próximo año, sus intentos por implementar armas nucleares para su uso en combate, mediante su sexta prueba nuclear y lanzamientos de misiles balísticos”, ha indicado el INSS en un informe.

Se estima que Corea del Norte intensifique, el próximo año, sus intentos por implementar armas nucleares para su uso en combate, mediante su sexta prueba nuclear y lanzamientos de misiles balísticos”, ha indicado el Instituto para la Estrategia de la Seguridad Nacional de Corea del Sur en un informe.

La nota destaca que Pyongyang podría realizar una prueba nuclear, en particular, entre los dos primeros meses del 2017, cuando en Corea del Norte se celebran dos aniversarios destacados, como es el cumpleaños del líder norcoreano, Kim Jong-un, y de su difunto padre, Kim Jong-Il.

De acuerdo con el INSS, los mencionados hipotéticos lanzamientos desatarían mayores confrontaciones y afectarían a las relaciones intercoreanas, conforme a la información recogida por la agencia surcoreana Yonhap.

 

Por este motivo, el Instituto expresa su preocupación acerca de que dichas provocaciones por parte de su vecino norteño tengan por resultado una mayor tirantez diplomática con la Administración de Trump, elevando las tensiones y provocando una nueva crisis nuclear en la región.

En su reporte, el INSS apunta a que el líder de Corea del Norte podría realizar una ofensiva pacífica, tratando de dialogar con Corea del Sur y EE.UU. en la segunda mitad del año, pero, no obstante, en caso de que no obtenga resultados, podría adoptar nuevamente “medidas provocativas”.

El pasado 9 de septiembre, Corea del Norte realizó su quinta prueba nuclear, provocando así una serie de condenas por parte de la comunidad internacional en su contra, incluidas varias sanciones impuestas por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU).

Desde entonces, la dialéctica bélica entre Washington y Pyongyang ha subido de tono con varias amenazas de un ataque nuclear preventivo y con reducir a cenizas al oponente. EE.UU. dice que con ese ataque desmantelaría el programa nuclear norcoreano y Corea del Norte busca responder a las crecientes “provocaciones” del país norteamericano y de su aliado Seúl.

krd/anz/mjs/rba