• El líder norcoreano, Kim Jong-un.
Publicada: martes, 23 de febrero de 2016 15:59
Actualizada: martes, 23 de febrero de 2016 16:45

Pyongyang ha advertido que realizará ataques de represalia, con métodos “estratégicos y tácticos”, en el caso de ver “una ligera señal” de operaciones especiales y equipos de Washington y Seúl.

Todos los métodos más potentes, estratégicos y tácticos de ataque de nuestras Fuerzas Armadas revolucionarias entrarán en operación preventiva para hacer retroceder a las fuerzas enemigas hasta el último hombre”, ha alertado este martes el Alto Mando militar de Corea del Norte.

Su advertencia se produce un día después de que el Ministerio de Defensa de Corea del Sur informara que firmará esta semana un acuerdo con Estados Unidos para iniciar oficialmente conversaciones sobre el polémico despliegue del sistema de Defensa del Área de Gran Altitud Terminal (THAAD, por sus siglas en inglés) en el país asiático.

Todos los métodos más potentes, estratégicos y tácticos de ataque de nuestras Fuerzas Armadas revolucionarias entrarán en operación preventiva para hacer retroceder a las fuerzas enemigas hasta el último hombre”, ha alertado el Alto Mando militar de Corea del Norte.

En este sentido, Corea del Norte ha amenazado con llevar a cabo ataques contra las bases militares estadounidenses en la región Asia-Pacífico, mientras ha aseverado que cuenta con “métodos de guerra ultramodernos”, lo que le hace capaz de “dar golpes mortales al territorio continental estadounidense en cualquier momento y en cualquier lugar" que desee.

Mientras tanto, ha indicado que el objetivo principal sería la Casa Azul presidencial de su vecino sureño, al que ha acusado de actuar como un "centro de conspiración y confrontación con los compatriotas en el norte".

La situación en la península coreana se ha tensado tras el lanzamiento, a principios de febrero, por parte de Pyongyang, de un cohete de largo alcance con el satélite de comunicaciones Kwangmyongsong-4.  Ese ensayo, además, desencadenó una ola de críticas a nivel internacional.

Sin embargo, en medio de las tensiones, Washington y Seúl decidieron poner en marcha negociaciones sobre la instalación del THAAD en la península coreana, además de iniciar el pasado viernes una maniobra militar conjunta.

Dichos actos, no solo han provocado el rechazo del Gobierno del líder norcoreano, Kim Jong-un — que sostiene que su programa nuclear tiene carácter disuasivo ante posibles agresiones de Seúl y Washington y sus maniobras militares conjuntas—, sino también preocupa a países de la región como China, pues los considera una amenaza para su propia seguridad.

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