"Hemos llegado a un acuerdo final, integral y definitivo sobre la totalidad de la agenda", anuncian las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos, en un comunicado conjunto, leído por el garante cubano Rodolfo Benítez.
El acuerdo fue elaborado en una reunión celebrada la noche del miércoles, un día después de que dos fuentes de la Administración confirmaran por separado el cierre de las negociaciones de paz luego de seis días de trabajo continuo en la capital cubana, La Habana, para poner fin al conflicto interno de 52 años que ha dejado al menos 220.000 muertos y millones de desplazados.
Hemos llegado a un acuerdo final, integral y definitivo sobre la totalidad de la agenda", anuncian en un comunicado conjunto entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos, leído por el garante cubano Rodolfo Benítez.
El documento ha sido rubricado por los jefes negociadores de las dos delegaciones, Humberto de la Calle por el Gobierno y Luciano Marín Arango, alias "Iván Márquez", en representación de las FARC, así como por los embajadores de Cuba y Noruega, países garantes en el proceso de paz.

En el acto, presidido por el canciller cubano, Bruno Rodríguez, las delegaciones han informado que el pacto final recoge todos los acuerdos suscritos en La Habana durante el proceso de cuatro años de diálogos. "Nos ceñimos a la Constitución de Colombia y los principios del derecho internacional", han dicho.
El jefe colombiano de Estado ya había adelantado este anuncio cuando dijo que las partes estaban dando "los últimos retoques" y expresó su esperanza de dar "una noticia histórica" para Colombia.
Ahora, el mencionado acuerdo debe firmarse entre el presidente Santos y Timoleón Jiménez (Timochenko), jefe máximo de la guerrilla. Ambos rubricaron el pasado 23 de junio un histórico pacto de cese el fuego bilateral para poner fin a medio siglo de enfrentamientos armados.
Para acabar definitivamente con el conflicto colombiano aún queda un paso: celebrar un plebiscito para que los colombianos decidan sobre lo consensuado entre las partes, tal y como el Tribunal Constitucional de Colombia aprobó en julio pasado.
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