“Vamos a adoptar de inmediato medidas en materia de derechos de aduana, de una magnitud equivalente”, ha informado el portavoz del Ministerio de Comercio de China a través de un comunicado.
Más temprano, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, había anunciado aranceles del 25 por ciento a una parte de las importaciones chinas valorada en 50 000 millones de dólares.
Además de expresar la firme oposición de Pekín al respecto, el portavoz chino ha llamado a otros países a una “acción colectiva” contra esta “conducta retrógrada” del país norteamericano.
Vamos a adoptar de inmediato medidas en materia de derechos de aduana, de una magnitud equivalente”, ha anunciado el portavoz del Ministerio de Comercio de China en alusión del aumento de los aranceles por EE.UU.
Del mismo modo, el funcionario ha lamentado que EE.UU. tome tales medidas, iniciando con ellas “una guerra comercial” contra Pekín. Según el portavoz, esa decisión no solo daña los intereses bilaterales, sino que también socava el orden comercial mundial.
Tras enfatizar que China no quiere una guerra comercial, el funcionario de Pekín ha precisado, no obstante, que el gigante asiático no tiene otra opción que luchar con determinación para salvaguardar sus intereses nacionales y defender la “globalización económica y el sistema multilateral de comercio”.
“Todos los resultados económicos y comerciales de las conversaciones anteriores ahora perderán efecto (…) Emprender una guerra comercial no se ajusta a los intereses mundiales actuales”, ha añadido.
Pekín había amenazado ya con dar por nulos los acuerdos alcanzados a principios de este mes de junio por el jefe negociador chino, Liu He, y el secretario de Comercio estadounidense, Wilbur Ross, si Washington seguía adelante con su guerra arancelaria.
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