Los 29 gobernantes de los países que por un día conformaron la Ruda de la Seda, se hallan reunidos en el marco de una foto, bajo un foro internacional llamado "Nuevas Rutas de la Seda". Se trata de un proyecto promovido por Pekín que pretende aumentar el desarrollo económico del mundo.
En el segundo día del evento, el presidente de China, Xi Jinping, rechazó el proteccionismo y abogó por más cooperaciones en el mercado internacional.
La iniciativa de las Nuevas Rutas de la Seda pretende reavivar la antigua Ruta de la Seda para conectar de nuevo los tres continentes: Asia, África y Europa. El proyecto incluye una ruta terrestre y otra marítima. El trayecto pasaría por 60 países que poseen el 75 por ciento de las reservas energéticas conocidas en el mundo.
El punto de vista del mandatario chino lo comparte su homólogo ruso, Vladimir Putin. Durante el evento, que duró dos días, Putin denunció que el proteccionismo amenaza a la economía global.
Tanto el mandatario chino como el ruso, así como otros miembros de esta asociación euroasíatica, confían en que el futuro de esta colaboración llevará a Europa y Asia a la paz, la estabilidad y la prosperidad. China presenta su nueva Ruta de la Seda como "un proyecto del siglo".
Según opina Pekín, su proyecto beneficia a todos los países miembros. Es todo lo contrario a las políticas económicas de algunos países que abogan por limitar el libre comercio por intereses propios.
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