Los detenidos proyectaban atacar con explosivos, armas de fuego y cuchillos varios lugares emblemáticos de la ciudad, como la estación de trenes, la Plaza de la Federación y la catedral de San Pablo, explicó el jueves a última hora el jefe de la Policía Estatal de Victoria (sudeste), Graham Ashton.
En las dos últimas semanas, indicó Ashton a la prensa, se ha estado llevando a cabo una investigación “sobre la formación de lo que creemos es un complot terrorista”.
Dos de los detenidos fueron puestos en libertad sin cargos, mientras que los otros cinco, todos en la veintena, permanecen bajo custodia. Cuatro de los cinco en prisión nacieron en Australia de familias de origen libanés y el quinto es un australiano nacido en Egipto.
Australia, aliado de Estados Unidos en la llamada coalición contra el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) elevó su nivel de alerta frente a la amenaza terrorista en septiembre de 2015, cuando los terroristas empezaron a regresar a sus países de origen desde Irak y Siria.
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