• Rodrigo Duterte, presidente de Filipinas, durante una sesión en el Congreso en Manila (la capital), 24 de julio de 2017.
Publicada: jueves, 3 de agosto de 2017 0:07
Actualizada: jueves, 3 de agosto de 2017 2:30

El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, insulta con duros términos al líder de Corea del Norte y alerta del peligro de los test misilísticos de Pyongyang.

"Este Kim Jong-un (...) está jugando con juguetes peligrosos, que tonto. Ese hijo de puta... si comete un error, el lejano Oriente se convertirá en una tierra desértica. Debe detenerse esta guerra nuclear", advierte Duterte, en referencia al programa de armas nucleares de Corea del Norte.

El mandatario filipino, conocido por sus polémicas declaraciones, ha exigido a la comunidad internacional a no dejarse engañar por el "aspecto de buena gente" del líder norcoreano, Kim Jong-un.

“No se dejen engañar por su rostro, ese rostro regordete que parece amable", ha dicho Duterte en un discurso transmitido el miércoles en vivo por la televisión filipina.

Este Kim Jong-un (...) está jugando con juguetes peligrosos, que tonto", dice el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte.

 

De acuerdo con Duterte, de producirse un conflicto nuclear en la península coreana, aunque sea limitado, la lluvia radiactiva "puede destruir el suelo y los recursos, y quién sabe qué pasará" en Filipinas y otros países de la región. 

Sus declaraciones han tenido lugar en las vísperas de la 50ª reunión de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN, por sus siglas en inglés) que tendrá lugar en Manila (capital filipina) con la participación de los ministros de Asuntos Exteriores de 27 países, incluido el canciller norcoreano. El conflicto de la península coreana será precisamente uno de los principales temas de la agenda de esta cita.

Duterte anteriormente ya ha lanzado críticas a Kim al que ha acusado de perseguir "ambiciones nucleares". 

El martes el secretario de Estado de EE.UU., Rex Tillerson, anunció que Washington no busca acabar con Pyongyang sino está dispuesto a entablar el diálogo para zanjar los problemas.

La península coreana vive momentos de alta tensión, desatada por el aumento de la presencia militar estadounidense en la zona, las maniobras militares conjuntas Washington-Seúl y las pruebas norcoreanas de misiles balísticos.

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