El secretario general de la organización panárabe, Ahmed Aboul Gheit, enfatizó el miércoles que apoya “totalmente la demanda presentada por Sudáfrica contra Israel ante la CIJ bajo la acusación de cometer crímenes de genocidio”, en el marco de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de 1948, y dijo que la LA tomaría “todas las medidas posibles” para hacer que Israel rinda cuenta.
“Aspiro una sentencia justa que frene esta guerra hostil y ponga fin al derramamiento de sangre palestina”, dijo el diplomático egipcio durante una rueda de prensa, al tiempo que agradeció al Gobierno sudafricano “por adoptar esta postura preliminar que pone la moral y los valores humanos por encima de cualquier otra consideración”.
Por su parte, el portavoz del secretario general, Gamal Roshdy, sostuvo que la demanda busca detener las ofensivas sangrientas de Israel a Gaza que en tres meses han asesinado a más de 23 000 personas, y también acabar con la situación irregular que hizo que Israel sea un régimen “por encima de la ley internacional y de la rendición de cuentas”.
Reafirmó el compromiso del organismo panárabe —formado por 22 países— con seguir la vía legal de la demanda y proporcionar el apoyo requerido de manera que sirva la causa y refuerce la postura palestina.
Expresó su esperanza de que el órgano judicial de las Naciones Unidas emite un fallo que ponga fin a “esta guerra injusta contra los civiles en la Franja de Gaza lo antes posible” y que “allane el camino para la rendición de cuentas para todos los responsables israelíes implicados en el crimen del genocidio, de manera que la justicia internacional pueda recuperar su credibilidad ante los pueblos del mundo”.
Sudáfrica presentó el pasado 29 de diciembre una demanda contra el régimen israelí ante la CIJ por “actos de genocidio contra el pueblo palestino en Gaza” durante la guerra en curso. El organismo judicial, a su vez, fijó fechas de la primera audiencia contra Israel para este jueves y viernes.
Decenas de países, de todos los continentes, han apoyado la demanda de Sudáfrica contra Israel, mientras que más de 1000 movimientos populares, partidos políticos, sindicatos y otras organizaciones de derechos humanos internacionales han pedido a los Estados seguir el paso valiente dado por Pretoria y llevar ante la justicia a las autoridades israelíes.
ftm/hnb
