Los funcionarios israelíes han estado en contacto con las autoridades de los Estados ribereños del Golfo Pérsico sobre la formación de una alianza militar, especialmente después de que el régimen de ocupación firmara acuerdos para normalizar las relaciones con los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Baréin, según informó el martes el think tank estadounidense Geopolitical Futures.
Según la fuente, de este modo, el régimen de ocupación de Tel Aviv tiene la intención de reducir la influencia de Irán en la región de Asia Occidental y evitar que Irán desarrolle armas nucleares. Eso mientras la República Islámica nunca ha buscado este tipo de armamentos.
El laboratorio de ideas estadounidense también indicó que los funcionarios de Israel con su intensa actividad política también buscan la adhesión de Arabia Saudí a esta posible alianza militar.
Como ejemplo, Geopolitical Futures se refirió a la llamada telefónica realizada la semana pasada por el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, con el príncipe heredero de Baréin, Salman bin Hamad bin Isa Al Jalifa; y a la visita del ministro israelí de relaciones exteriores, Gabi Ashkenazi, a los Emiratos Árabes Unidos y Omán.
Los intentos en vano de Israel para crear una alianza militar contra Irán se producen mientras la República Islámica, destacando su elevada capacidad defensiva y disuasiva, asegura que dará una respuesta contundente a cualquier amenaza, incluida la de este régimen.
De hecho, las autoridades del país persa han advertido a Israel que, si comete el más mínimo error contra la República Islámica, ésta pondrá fin a la existencia de dicho régimen.
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