En una declaración conjunta, AI y el Observatorio de los Derechos Humanos (HRW, en inglés) han reclamado que se despoje a Arabia Saudí de sus derechos a formar parte del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (CDHNU) hasta que cese su ofensiva ilegítima contra Yemen.
"Está en juego la credibilidad del Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Desde que se incorporó al Consejo, el terrible historial en materia de Derechos Humanos de Arabia Saudí dentro del país ha seguido empeorando, y la coalición que encabeza ha matado y herido ilegítimamente a miles de civiles en el conflicto de Yemen", ha denunciado el director de la oficina de AI ante la ONU, Richard Bennet.
Está en juego la credibilidad del CDHNU. Desde que se incorporó al Consejo, el terrible historial en materia de DDHH de Arabia Saudí dentro del país ha seguido empeorando, y la coalición que encabeza ha matado y herido ilegítimamente a miles de civiles en el conflicto de Yemen", ha denunciado el director de la oficina de AI ante la ONU, Richard Bennet.
Bennet ha denunciado que Riad ha utilizado su posición en el CDHNU para obstruir efectivamente la justicia por posibles crímenes de guerra, y eso huele a profunda hipocresía y desacreditaría al máximo órgano de Derechos Humanos del mundo.
Ha lamentado que los sólidos indicios de la comisión de crímenes de guerra por parte de Arabia Saudí y sus aliados en Yemen deberían haber sido investigados por el Consejo de Derechos Humanos, sin embargo, Arabia Saudí usó cínicamente su pertenencia al CDHNU para hacer descarrilar una resolución para abrir una investigación internacional.
En otra parte de sus declaraciones, ha asegurado que Arabia Saudí debe mantener los estándares más elevados en los derechos humanos, pero, además de usar armas prohibidas internacionalmente en zonas civiles en Yemen, ha llevado a cabo cientos de ejecuciones, ha condenado a muerte a menores de 18 años y ha reprimido a los activistas de la oposición y los defensores de los Derechos Humanos.
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