El Ejército de EE.UU., tras dar muerte al jefe del grupo terrorista Al-Qaeda, en 2011, en Afganistán, incautó varios documentos en la vivienda donde se encontraba Bin Laden, entre los que se encontraba una nota que, según creen expertos de la Inteligencia estadounidense, podría ser su testamento.
El documento está escrito a mano y se cree que el saudí lo redactó a finales de la década de los 90 del siglo XX; en el mismo se indica cómo se deben distribuir los aproximadamente 29 millones de dólares que tenía en Sudán, de acuerdo con la información divulgada este martes por medios estadounidenses.
Espero que mis hermanos, hermanas y (…) cumplan mi voluntad y gasten todo el dinero que me queda en Sudán y en terrorismo (…)”, escribió en su testamento el exlíder de Al-Qaeda Osama bin Laden.
Bin Laden estipuló que la mayor parte de su fortuna se destinara a seguir su legado terrorista: “Espero que mis hermanos, hermanas y (...) cumplan mi voluntad y gasten todo el dinero que me queda en Sudán" y en la lucha.
Asimismo, señaló que un tanto por ciento de los 29 millones de dólares debería ser entregado al alto lugarteniente bajo sus órdenes Mahfouz Ould al-Walid, mejor conocido como Abu Hafs al-Mauritani, mientras que otro por ciento iría a parar a manos de otro colaborador suyo, el ingeniero Abu Ibrahim al-Iraqi Sa’ad, quien le ayudó a establecer su empresa Wadi al-Aqiq Co. en Sudán.
También dejó algo a sus familiares más allegados, como divisas saudíes o lingotes de oro, y pidió a su progenitor que cuide de su esposa e hijos y que le perdone “si he hecho lo que no querías”.
La Administración del expresidente de EE.UU. George W. Bush acusó al líder de la red Al-Qaeda de organizar los atentados del 11 de septiembre de 2001 contra las Torres Gemelas, en Nueva York, y el Pentágono, en Washington, y escudándose en dichos hechos comenzó su aventura bélica en Irak y posteriormente en Afganistán.
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