La agencia de noticias oficial siria SANA, citando una fuente militar, ha informado este lunes que los grupos terroristas perdieron el control de varios bloques de edificios en el barrio Hay al-Hakmah, en el este de la ciudad fronteriza de Al-Zabadani.
En estas operaciones, agrega la fuente, los efectivos del Ejército sirio y las fuerzas del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) también recuperaron la escuela Sharif Idris, así como la calle principal del barrio oeste ubicadas en pleno centro de la ciudad.
Otros reportes de medios libaneses apuntan que al menos nueve takfiríes, incluidos dos cabecillas del grupo Ahrar al-Sham, identificados como Adel Nayef Halima y Abdelilah Nazhi al-Jous, han muerto y otros nueve han sido arrestados durante las operaciones antiterroristas en el distrito de Al-Barada, en el sur de la urbe siria.
Con este nuevo logro, el Ejército sirio y Hezbolá se preparan para avanzar hacia la principal iglesia de esta ciudad, la última posición en poder de los takfiríes en Al-Zabadani.
Por su parte, los grupos terroristas han recurrido a ataques ciegos con mortero contra zonas residenciales. Al menos seis civiles, entre ellos un menor de edad, y otros 20 resultaron heridos por el impacto de granadas en barrios de la capitalina ciudad de Damasco y la provincia noroccidental de Idlib.
Desde el inicio de la crisis siria, en marzo de 2011, el Ejército ha dado emprendido una incesante lucha para erradicar varios grupos armados, que apoyados por ciertos países regionales y occidentales, entre ellos Arabia Saudí, Turquía y EE.UU., buscan derrocar al Gobierno del presidente Bashar al-Asad.
De acuerdo al opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), la violencia provocada por estos grupos terroristas ha dejado más de 240.000 muertos y el desplazamiento de varios millones.
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