• Un avión Tupolev Tu-154M de la aerolínea rusa Aeroflot.
Publicada: viernes, 6 de noviembre de 2015 13:48
Actualizada: jueves, 13 de abril de 2017 6:41

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha ordenado este viernes suspender los vuelos a Egipto atendiendo a una recomendación del Servicio de Seguridad Federal (FSB, en ruso).

El FSB había recomendado poco antes la suspensión de todos los vuelos de pasajeros al país norteafricano hasta aclararse la causa de la reciente caída de un avión ruso en territorio egipcio.

El jefe de Estado ha dado su visto bueno a esas recomendaciones. Putin ha dado al Gobierno instrucciones para que elabore mecanismos de implementación de las recomendaciones del FSB”, señala el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.

“El jefe de Estado ha dado su visto bueno a esas recomendaciones. Putin ha dado al Gobierno instrucciones para que elabore mecanismos de implementación de las recomendaciones del FSB”, ha anunciado el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.

El avión en cuestión, un Airbus A321 perteneciente a la aerolínea rusa Metrojet (Kogalymavia), se estrelló el pasado sábado en la península egipcia del Sinaí mientras realizaba el trayecto Sharm el-Sheij-San Petersburgo. Los 224 pasajeros que viajaban en la aeronave fallecieron.

El vocero de Putin ha informado de que el mandatario ruso ha instado además a las autoridades del país a que cooperen de manera estrecha con sus homólogos egipcios para garantizar la seguridad del tráfico aéreo entre Rusia y el país norafricano.

La recomendación de suspender los vuelos había sido hecha este mismo viernes por el director del FSB, Alexander Bortnikov, en una reunión extraordinaria del Comité Antiterrorista Nacional de Rusia.

Los restos del Airbus A321 caído en la península egipcia del Sinaí son examinados por los expertos.

 

Por lo demás, el jefe del Estado ruso ha ordenado a sus funcionarios que preparen la evacuación de Egipto de los ciudadanos de Rusia, de modo que retornen a su país sanos y salvos.

Mientras tanto, una investigación, liderada por El Cairo y con cooperación de expertos rusos y extranjeros, está por determinar las causas del siniestro. Hasta ahora no se ha descartado que la caída del avión fuera causada por una explosión ocurrida dentro de la aeronave.

Tras el incidente, se divulgó un vídeo en nombre de la rama del grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) en la península del Sinaí, en el que se afirmaba haber derribado el avión en venganza por la campaña que lleva a cabo el Ejército ruso en Siria.

Tras publicarse la grabación, tanto Moscú como El Cairo declararon “poco probable” la versión que presenta, a diferencia de la Inteligencia de Estados Unidos, que da credibilidad a la tesis de que la caída del avión ruso podría ser obra de Daesh.

De acuerdo con la información proporcionada por el director del FSB, Rusia ha recibido ya muestras de los restos del A321 y las está examinando, a la vez que otros expertos rusos examinan los restos del avión que siguen en el lugar de los hechos, en el Sinaí.

Bortnikov ha recalcado además, este viernes, que la investigación debe ser exhaustiva y mantenerse mientras sea necesario, añadiendo que es “necesario cooperar estrechamente con las autoridades egipcias para continuar la investigación conjunta sobre las causas” de la peor catástrofe aérea de la historia de Rusia.

Tras la tragedia, varios Gobiernos y aerolíneas europeos cancelaron sus vuelos a la ciudad egipcia de Sharm el-Sheij, por el creciente temor a que la caída del A321 ruso haya sido ocasionada por un explosivo colocado por algún grupo terrorista.

zss/mla/mrk