“Parece que Arabia Saudí, extendiendo las tensiones y conflictos, no solo piensa en sus intereses, también en su supervivencia. De hecho, trata de resolver sus problemas evadiendo sus responsabilidades”, ha subrayado este lunes el portavoz de la Cancillería iraní, Husein Yaber Ansari.
“Parece que Arabia Saudí, extendiendo las tensiones y conflictos, no solo piensa en sus intereses, también en su supervivencia. De hecho, trata de resolver sus problemas evadiendo sus responsabilidades”, ha subrayado este lunes el portavoz de la Cancillería iraní, Husein Yaber Ansari.
En su rueda de prensa semanal, el diplomático persa ha comentado que Teherán preserva la seguridad de las sedes diplomáticas en su país, por lo que el régimen de Al Saud está utilizando los recientes ataques a sus consulados Irán como una excusa para avivar las tensiones.
Los hechos ocurrieron la noche del sábado: el anuncio de la ejecución del clérigo chií el sheij Nimr Baqer al-Nimr por el régimen de Al Saud desató masivas protestas en diferentes ciudades de Irán y otros países. La embajada y el consulado de Arabia Saudí en Teherán y Mashad (noreste de Irán), respectivamente, fueron atacados por algunos manifestantes.
Después de los incidentes, la policía diplomática iraní detuvo a al menos 50 personas por su supuesta implicación en los ataques, y restauró el orden público y la seguridad en dichos lugares. No obstante, la Cancillería saudí anunció la ruptura de relaciones diplomáticas con el país persa, pretextando los incidentes y las críticas de Teherán por la ejecución del sheij Al-Nimr.
El domingo, el vicecanciller iraní para Asuntos Árabes y Africanos, Husein Amir Abdolahian, dijo que la decisión de Riad de romper lazos diplomáticos con Teherán no puede encubrir el nuevo error estratégico cometido al ejecutar a una figura religiosa de renombre.
Amir Abdolahian aseguró que ningún diplomático saudí resultó herido y subrayó que Irán es uno de los países más seguros de la región y que todos los diplomáticos siguen trabajando con plena seguridad.
Ansari, por último, ha negado que algunos otros países árabes de la región hayan cortado sus lazos con Irán siguiendo los pasos de Riad, y asegura que Teherán cuenta con vínculos amistosos con todos los Estados de la zona.
Según Yaber Ansari, Irán no prevé una mejora en sus relaciones con Arabia Saudí, si este país sigue adoptado “políticas ilógicas” y provocadoras en la región.
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