Al menos siete palestinos han resultado heridos y decenas más han sufrido intoxicaciones por la inhalación de gases lacrimógenos lanzados por los soldados israelíes que arremetieron de forma brutal contra la marcha que condenaba la sistemática construcción de asentamientos ilegales israelíes y el muro de separación, más conocido como el muro del apartheid, en varias zonas de Cisjordania.
Además, varios manifestantes, entre ellos, Mohamad Adib Bu Rahma, un joven de 19 años de edad, fueron detenidos durante la protesta.
El incidente del viernes se produce una semana después de que las fuerzas israelíes reprimieran violentamente las protestas en Cisjordania con motivo del Día de los Presos Palestinos.
Los habitantes de Bilin cumplieron este 2015 el décimo año consecutivo de marchas semanales contra el muro de separación en la citada ciudad, que fue construido en tierra palestina en 2005.
Más de medio millón de israelíes viven en unos 120 asentamientos ilegales construidos desde la ocupación de los territorios palestinos en 1967 en Cisjordania, incluido Al-Quds (Jerusalén).
La crítica internacional contra los asentamientos israelíes en tierras ocupadas palestinas ha aumentado. Estas viviendas son consideradas "ilegales" por las Naciones Unidas y la mayoría de los países, ya que han sido edificadas en los territorios arrebatados por el régimen israelí en la llamada Guerra de los Seis Días de 1967, lo que contradice las leyes internacionales.
Por otro lado, los soldados israelíes han disparado e herido en la misma jornada a dos palestinos en Jan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza. Según los testigos oculares, todo ha ocurrido después de que los palestinos hayan protestado y arrojado piedra contra las fuerzas del régimen de Tel Aviv que se habían desplegado en las tierras agrícolas palestinas.
Las fuerzas israelíes han abierto varias veces fuego contra civiles palestinos en Jan Yunis, desde el acuerdo de alto el fuego firmado 26 de agosto 2014 que puso fin a una devastadora agresión israelí de 50 días al enclave costero, que dejó unos 2310 palestinos perecieron y más de 10.626 resultaron heridos, en su mayoría civiles.
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