Algo no está funcionando como debiera. El discurso de Netanyahu en el Congreso debería haber servido para reforzar al Likud en las encuestas; sin embargo, está claro que no ha sido así”.
“Algo no está funcionando como debiera. El discurso de Netanyahu en el Congreso debería haber servido para reforzar al Likud en las encuestas; sin embargo, está claro que no ha sido así”, aseveraron integrantes del partido citados por el diario israelí Haaretz.
Más allá, los sectores derechistas agregaron que el Likud podría perder los comicios, porque el discurso del premier acerca del peligro de un acuerdo entre Irán y el Grupo 5+1(EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania) sobre el programa nuclear iraní tuvo muchos efectos colaterales.
Una encuesta elaborada el mismo día por el diario israelí Yediot Aharonot pone de relieve de manera optimista que el Likud podría obtener 22 escaños frente a los 26 de la coalición llamada Campo Sionista, integrada por dos formaciones políticas.
Los partidos israelíes Laborista y Hatnuá, liderados por Itzhak Herzog y Tzipi Livni, respectivamente, anunciaron en diciembre de 2014 su coalición para derrotar al primer ministro del régimen de Israel, Benyamin Netanyahu, en las elecciones anticipadas del 17 de marzo.
Por otro lado, el rotativo Haaretz pronosticó que el Likud se enfrentará a muchos retos como la pérdida de un número importante de votantes.
El discurso de Netanyahu se produjo en pleno diálogo entre Irán y el G5+1 para despejar posibles dudas sobre la naturaleza pacífica del programa de energía nuclear iraní y terminar con las sanciones ilegales y unilaterales contra el país persa.
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