De acuerdo con las fuentes militares, la bomba fue escondida debajo de una mesa en el mercado y explotó alrededor de las 13:00 hora local, provocando la muerte de compradores y turistas, entre otros.
Esto se produce mientras que el portavoz de la Cruz Roja nigeriana, Umar Sadiq, ha declarado que el mencionado atentado ha dejado 13 muertos y 24 heridos, quienes fueron trasladados a dos hospitales de la ciudad.
Hasta el momento nadie ha reivindicado la autoría del atentado, que sucede después de que el grupo terrorista Boko Haram atacara nuevamente Maiduguri con granadas lanzadas por cohetes este martes temprano, tras haber realizado un ataque similar el sábado.
“Sacudió el edificio de nuestra escuela y tuve que huir. Vi vehículos del Ejército con soldados avanzando hacia el área”, afirmó uno de los testigos en la localidad.
El sábado, al menos 26 personas murieron y otras 28 resultaron heridas en un ataque suicida perpetrado por el grupo terrorista Boko Haram contra una mezquita en el norte de Nigeria.
Todos estos ataques tienen lugar después de que el presidente de Nigeria, Muhammadu Buhari, se comprometió el viernes a hacer frente a “enormes desafíos” como la corrupción y el grupo takfirí Boko Haram.
Asimismo, el pasado 27 de mayo el presidente insistió en que este grupo extremista no tiene nada que ver con la religión. “Ninguna religión permite la matanza de niños en los dormitorios de la escuela, en los mercados y lugares de culto”, dejó en claro.
Boko Haram desde hace seis años siembra el terror en el territorio nigeriano, donde comete crímenes de lesa humanidad, y secuestros masivos.
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