“La respuesta al extremismo requiere alianzas, no un diálogo impuesto desde arriba”, ha subrayado este lunes Fiyaz Mughal, director de la organización Faith Matters (Cuestiones de la Fe).
La respuesta al extremismo requiere alianzas, no un diálogo impuesto desde arriba”, ha subrayado Fiyaz Mughal.
Al calificar de “simplistas” las declaraciones de Cameron sobre lo que causa atracción en el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe), Mughal ha subrayado que la ideología extremista no es la única razón que lleva a los individuos hacia el extremismo violento.
Ha aseverado también que el Gobierno británico debe considerar varios factores a fin de evitar la extensión de la radicalización y el extremismo entre los jóvenes británicos.
Por su parte, el secretario general del Consejo Musulmán de Reino Unido, Shuja Shafi, ha expresado su preocupación por la nueva estrategia del Gobierno británico ya que, a su juicio, etiqueta a todos los musulmanes como extremistas.
De acuerdo con Shafi, todos los musulmanes británicos quieren luchar contra la ideología radical, pero se necesita definir exactamente el término “extremismo” antes de caer en la retórica y profundos errores que apuntan al Islam como propulsor de la radicalización.
Estas críticas se producen después de que Cameron presentara el mismo día en la ciudad británica de Birmingham un plan quinquenal para hacer frente a la radicalización entre los jóvenes británicos.
El Gobierno conservador de Londres ha lanzado su proyecto aduciendo que es hora de hacer frente con una ideología que ha atraído a muchos jóvenes a los grupos terroristas, en particular a Daesh.
Cameron ha añadido que la ideología extremista debe ser contrapesada para que el Reino Unido sea una nación más inclusiva en la que los musulmanes jóvenes sientan que pueden participar.
El domingo, el primer ministro declaró que se ha comprometido a cooperar con Washington en su lucha contra Daesh, si bien, lamentó que su Gobierno quiere “hacer más” pero necesita la aprobación del Parlamento.
El Gobierno británico ha aumentado su presupuesto destinado para la lucha contra el grupo terrorista EIIL. Cameron lo anunció el pasado 13 de julio en una visita a instalaciones de la fuerza aérea británica donde reafirmó su intención de contar con más aviones espías y más fuerzas especiales.
La Policía británica ha estimado que unos 700 ciudadanos de su país han viajado a Siria o Irak para engrosar las filas del grupo takfirí EIIL.
En el caso más reciente, a principios de este mes, una familia británica de 12 miembros confirmó su adhesión a la banda takfirí Daesh en Siria.
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