• El premier israelí, Benyamin Netanyahu (izqrda.), se reúne en la Casa Blanca con el presidente de EEUU, Barack Obama (drcha.), 20 de mayo de 2011.
Publicada: domingo, 25 de octubre de 2015 8:40

El presidente estadounidense, Barack Obama, y el primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, no se tienen confianza, opina Dennis Ross, un exdiplomático norteamericano.

En una entrevista exclusiva con el diario israelí Yediot Aharonot publicada el sábado, Ross descartó que un presidente o un premier puedan perjudicar las relaciones estadounidense-israelíes.

A su juicio, la frialdad que existe actualmente entre Obama y Netanyahu por el programa de energía nuclear de Irán no es el impasse más serio que hayan experimentado los líderes de ambas partes a lo largo de la historia.

Lo peor, en opinión de Ross, acaeció durante los mandatos de George H. W. Bush (1989-1993) y Yitzjak Shamir (1986-1992) cuando el presidente estadounidense pensó que Shamir lo había engañado sobre la construcción de los asentamientos ilegales en los territorios ocupados palestinos.

Estados Unidos y el régimen de Israel tuvieron mayores divergencias sobre el asedio de Beirut (capital libanesa) y la matanza de palestinos de Sabra y Chatila ocurrida en 1982 en El Líbano que sobre el programa nuclear iraní, insistió el exdiplomático.

Dennis Ross, diplomático y escritor estadounidense.

 

Ross subrayó que pese a todos los altibajos, las relaciones bilaterales mejoraron con el paso del tiempo y afirmó que es importante que se mantengan los vínculos y los líderes de EE.UU. e Israel deben trabajar para fortalecerlos.

El diplomático estadounidense publicó recientemente un libro titulado Condenado al éxito, que aborda las relaciones entre Estados Unidos e Israel desde la Administración de Harry Truman (1945-1953) hasta el Gobierno de Obama. En él reconoce el hecho de que dentro de EE.UU. existen tanto quienes ven a Israel como un siempre aliado de Washington como los que lo consideran una “carga” para el país.

Ross aseveró que durante el desempeño de sus funciones en varios gobiernos de EE.UU., en las filas demócratas y en las republicanas, le hizo ver que todos los malentendidos y las crisis entre Washington y el régimen de Tel Aviv pueden ser minimizados con un enfoque diferente y con una sola llamada telefónica.

De acuerdo con Dennis Ross, todos los presidentes norteamericanos tratan de evitar abordar, al inicio de sus mandatos, asuntos relacionados con Israel y el Oriente Medio, pero lo ven imposible. Por eso, él cree que no vio una gran diferencia entre los gobiernos de EE.UU. en la actitud hacia Israel.

Además señaló al rotativo israelí que la reunión Obama-Netanyahu, que se llevará a cabo el próximo 9 de noviembre en la Casa Blanca, disminuirá la actual crisis entre los líderes, porque ambos están interesados en dejar atrás las rencillas.

Las tensiones entre Obama y Netanyahu llegaron a su pico cuando el premier israelí ofreció un discurso en el Congreso de EE.UU. el pasado 3 de marzo sobre los peligros que conllevará un acuerdo nuclear con la República Islámica de Irán.

De cualquier manera, Teherán y el Grupo 5+1 —formado por EE.UU., el Reino Unido, Rusia, China y Francia más Alemania— lograron el pasado 14 de julio el Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA, por sus siglas en inglés), mediante el cual se reconocía el derecho de Irán a enriquecer uranio y se daba luz verde al levantamiento de las sanciones.

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