Según el jefe policial de Saint Louis, Jon Belmar, el asesinato se produjo la noche del viernes, después de que el hombre negro identificado como Thaddeus McCarroll, saliera de la casa para atacar con un cuchillo a los policías que durante dos horas trataban de hacerle abandonar la casa de su madre, donde se había atrincherado.
Por su parte, dos agentes abrieron fuego y acabaron con la vida de McCarroll.
Este asesinato brutal se suma a los últimos incidentes similares en los que agentes policiales blancos asesinaron a ciudadanos afroamericanos, hechos que han provocado multitudinarias marchas antirracistas en la mayoría de las ciudades estadounidenses.
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