El acuerdo, que ha recibido el nombre de "Paquete de asilo II", contará con una única excepción: la de los refugiados sirios con familiares alojados en los campos de acogida de Turquía, Jordania y El Líbano, ha informado este viernes el semanario Der Spiegel en su edición digital.
Esta medida considera a Marruecos, Argelia y Túnez como "países de origen seguro", por lo que las peticiones de asilo de los ciudadanos de esas naciones serán rechazadas, salvo en los casos en que se demuestre que la integridad física de la persona está en riesgo.
Los refugiados en los centros de registro no podrán viajar por Alemania y se les prohibirá abandonar el barrio donde se fije su residencia. En caso de infracción, se les penalizará con la retirada de prestaciones sociales, además de deber pagar de su propio bolsillo los cursos de integración, para los que se fijará una tasa de 10 euros mensuales.
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