"La oposición siria pronto podrá adquirir misiles tierra-aire, lo que provocará la ira de Rusia e Irán", señala un funcionario saudí de alto rango, citado por el portal Web israelí DEBKAfile.
Según el informe, el reciente envío del buque anfibio ruso Novocherkassk con equipamiento militar hacia el puerto sirio Tartus ha generado una gran preocupación entre las autoridades saudíes, por lo que el régimen de Riad busca acelerar el envío de misiles a los llamados grupos rebeldes que luchan contra el Gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad.
La oposición siria pronto podrá adquirir misiles tierra-aire, lo que elevará la ira de Rusia e Irán", señala un funcionario saudí de alto rango, citado por el portal Web israelí DEBKAfile.
Novocherkassk ha suministrado varios tanques T-90 al Ejército sirio y se espera también la llegada de una cantidad de sistemas de lanzacohetes, agrega.
"Al igual que hace 30 años, cuando Arabia Saudí no dudó en enfrentarse en Afganistán al Ejército ruso, ahora no dudaremos en hacer frente al Ejército ruso en Siria", subrayó la fuente saudí en alusión a la entrega de sistemas de defensa aérea portátil (MANPAD, por sus siglas en inglés) a los grupos armados afganos que luchaban contra las fuerzas soviéticas en la Guerra de Afganistán (1979-1989).
Según los expertos consultados por DEBKAfile, en la Guerra de Afganistán, los saudíes actuaron con el apoyo de Estados Unidos, mientras que en Siria los norteamericanos se oponen fuertemente a cualquier intervención saudí.
Nic R.Jenzen-Jones, experto en armas y director de Armament Research Services, una consultoría especializada en inteligencia técnica, afirmó el mes pasado que los sistemas de defensa aérea portátil o los misiles superficie-aire (SAM, en inglés) tienen una eficacia limitada y no suponen un peligro para los modernos bombarderos rusos en Siria.
El sitio israelí recuerda que Arabia Saudí ha adoptado también medidas para preparar una intervención militar directa en Siria, incluido el envío de cuatro cazas F-15 en la base turca Incirlik, cerca de la frontera siria, donde también planea desplegar un contingente de tropas terrestres para un eventual ataque a Siria.
Rusia, desplegando un gran número de sus aeronaves militares, ha prestado apoyo al Gobierno sirio contra los terroristas y, desde el comienzo de su campaña antiterrorista a finales de septiembre de 2015, ha ayudado a las fuerzas sirias a recuperar varias zonas de manos de los grupos extremistas, que, de hecho, gozan del apoyo de Riad y de sus aliados regionales e internacionales.
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