• El presidente ruso, Vladimir Putin (dcha.), y su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, en Ankara, capital de Turquía, 1 de diciembre de 2014.
Publicada: viernes, 27 de noviembre de 2015 7:43

Rusia rompe todos sus contactos militares con Turquía, tras el derribo de su avión Su-24 por el Ejército turco, informa el Ministerio ruso de Defensa.

Hoy, de acuerdo con las decisiones tomadas con anterioridad, se han suspendido todos los canales de comunicación entre el Ministerio de Defensa de Rusia y las Fuerzas Armadas de Turquía”, hizo saber el jueves el vocero de dicha Cartera rusa, el general Igor Konashenkov.

Hoy, de acuerdo con las decisiones tomadas con anterioridad, se han suspendido todos los canales de comunicación entre el Ministerio de Defensa de Rusia y las Fuerzas Armadas de Turquía”, dijo el portavoz del Ministerio ruso de Defensa, Igor Konashenkov.

Según el general ruso, la decisión incluye “todos los vínculos, y no solo la línea roja” que fue creada entre las dos entidades con el fin de impedir incidentes aéreos “durante la destrucción de la infraestructura terrorista en Siria”.

El martes, un avión ruso tipo Sujoi-24 fue derribado cerca de la frontera sirio-turca, tras ser impactado por dos cazas turcos F-16. Ankara argumenta que el aparato ruso violó su espacio aéreo, mientras Moscú desmiente esta versión insistiendo en que su nave no entró en territorio turco “ni un solo segundo” ya que sobrevoló todo el tiempo el territorio de Siria.

Un avión de combate F-16 de la Aviación de Turquía.

 

Konashenkov, de igual modo, criticó la negativa de Turquía a poner a disposición de Rusia los datos relacionados al siniestro del Su-24, así como la ausencia de una disculpa pública, una promesa de reparación o de castigo a los culpables

“La parte turca se negó a entregar documentos o informaciones en torno a este accidente (…) por que considera imposible entregar dichos datos”, indicó.

El aparato ruso participaba en una operación en el marco de la campaña de ataques aéreos contra las posiciones de grupos terroristas que lanzó Rusia a finales de septiembre después de que el presidente sirio, Bashar al-Asad, solicitara a Moscú asistencia militar para combatir a las bandas terroristas.

Las relaciones entre Ankara y Moscú se han crispado por el derribo del Sujoi. Rusia ha adoptado represalias económicas contra Turquía y según dicen los funcionarios rusos, podrían anularse varios proyectos beneficiosos para la parte turca.

Horas después del hecho, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, condenó en duros términos el ataque turco que tildó de “una puñalada por la espalda” de los cómplices del terrorismo y advirtió de las "graves consecuencias" que acarreará a las relaciones entre Rusia y Turquía.

También el canciller ruso, Serguei Lavrov, canceló su viaje oficial a Turquía y recomendó a los ciudadanos rusos abstenerse de viajar al territorio turco.

mjs/ncl/mrk