• El senador republicano, John McCain.
Publicada: martes, 19 de mayo de 2015 9:02

El senador republicano estadounidense John McCain culpó el lunes al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, por la toma de la ciudad de Al-Ramadi, capital de la provincia occidental de Al-Anbar, por el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe).

“Esto es otra consecuencia del fallo de la administración y este presidente que no dejó una fuerza residual en Irak”, dijo McCain, durante una entrevista con el canal estadounidense de MSNBC.

Esto es otra consecuencia del fallo de la administración y este presidente que no dejó una fuerza residual en Irak”, dijo McCain

Según el senador, la falta de soldados estadounidenses fue la principal causa de la derrota del Ejército iraquí y exigió que se desplieguen más tropas en Irak para, supuestamente, combatir a Daesh.

También, defendió la sangrienta y devastadora invasión estadounidense a Irak en 2003 y alegó que dicha invasión aumentó la seguridad y la estabilidad en el Oriente Medio.

Soldados estadounidenses patrullan un campo petrolífero durante la invasión de EE.UU. a Irak en 2003.

 

“No me gusta ser repetitivo, pero el hecho es que gracias a la invasión teníamos la situación bajo control y esta [la caida de Al-Ramadi] es otra de las consecuencias del fracaso de este gobierno y este presidente para dejar una fuerza residual atrás", dijo.

No me gusta ser repetitivo, pero el hecho es que gracias a la invasión teníamos la situación bajo control y esta [la caida de Al-Ramadi] es otra de las consecuencias del fracaso de este gobierno y este presidente para dejar una fuerza residual atrás", dijo McCain 

McCain no ha sido el único que se ha hecho uso de la actual situación de Irak para tratar de justificar la invasión estadounidense a este país. El domingo, Marco Rubio, uno de los candidatos a la Presidencia de EE. UU., también republicano, defendió dicha invasión.

Luego de días de intensos combates, Daesh ocupó la ciudad de Al-Ramadi el pasado domingo, hecho que provocó la huida de unos 25.000 residentes de esta ciudad hacia Bagdad, capital iraquí, una de las urbes más seguras del país que está a 100 kilómetros de Al-Ramadi.

Fuerzas populares iraquíes durante uno de sus combates con los takfiríes en Al-Ramadi.

 

Este hecho mostró, una vez más, la ineficacia de los bombardeos de la llamada coalición anti-EIIL liderada por EE. UU. que hasta en ocasiones ha enviado armas "por error" a los terroristas que operan en Irak y Siria.

En respuesta a este avance de los terroristas, las fuerzas populares y el Ejército de Irak anunciaron que se están reforzando para liberar Al-Ramadi de Daesh y expulsarlos de la zona.

Desde junio de 2014 las fuerzas militares de Irak tratan de expulsar a los takfiríes, quienes según las evidencias, cuentan con el apoyo del régimen israelí y algunos países aliados de EE. UU. como Arabia Saudí y Turquía.

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