“Se trata sin duda alguna de una peligrosa violación de los lugares santos del islam” , ha denunciado este sábado el mandatario egipcio, Abdel Fatah al-Sisi, durante una rueda de prensa con el presidente del Consejo Europeo (CE), Donald Tusk, en la capital egipcia de El Cairo.
“Se trata sin duda alguna de una peligrosa violación de los lugares santos del islam” , ha denunciado el mandatario egipcio, Abdel Fatah al-Sisi.
Desde el domingo, la Mezquita Al-Aqsa es objeto de brutales ataques por parte de soldados israelíes. En estos ataques las fuerzas israelíes han utilizado gases lacrimógenos, balas de goma y hasta granadas de aturdimiento para dispersar a los palestinos. La represión israelí ha dejado un saldo de centenares de heridos entre los palestinos.
El dignatario egipcio critica al régimen de Tel Aviv por su “lentitud a la hora de asumir sus responsabilidades según el derecho internacional”, que le obliga a no dañar sitios sagrados y protegerlos ante cualquier agresión.
Pese a que varios países y organismos internacionales han advertido de las consecuencias negativas de las agresiones israelíes a la Mezquita Al-Aqsa, las fuerzas del régimen siguen su táctica de asalto y represión de los palestinos.
El viernes miles de palestinos salieron a las calles para protestar contra las agresivas políticas del régimen israelí contra la Mezquita Al-Aqsa, cuya meta es dividir el recinto sagrado entre judíos y musulmanes.
En la misma jornada del viernes, el Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS) aseguró que en adelante no se comprometerá a mantener la tregua con el régimen israelí y afirmó que, en tres años, liberará la Mezquita Al-Aqsa de manos del régimen israelí.
La Explanada de las Mezquitas alberga la Cúpula de la Roca y la Mezquita Al-Aqsa, el tercer lugar más sagrado del Islam. El régimen israelí, que se arroga la propiedad de los territorios palestinos desde el inicio de su ocupación, pretende judaizar el recinto y eliminar su identidad islámica.
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