Por medio de un comunicado citado este martes por la cadena de noticias catarí Al Jazeera, el organismo ha advertido sobre la detonación de numerosos explosivos dejados por el ejército israelí en los hogares palestinos que parecen especialmente a las conservas.
Ha informado de varios casos de explosión de estos botes de bombas que se han registrado recientemente en Gaza, entre ellos una escalofriante lesión que sufrió Muhamad Yaser Samour, de 14 años, en las ruinas de su casa en Al-Zannah en la ciudad de Jan Yunis, cuando encontró una lata de restos de comida del ejército israelí que, al abrirla, ocurrió una explotación.
El incidente provocó que varias partes de su cuerpo quedaran cercenadas y otras personas que se encontraban a su lado también resultaron heridas.
La Oficina gazatí de Medios ha agregado que, según evaluaciones e informes internacionales, que también son confirmados por las oficinas gubernamentales del enclave, alrededor del 10 % de los proyectiles y misiles que el ejército del régimen sionista disparó contra La Franja de Gaza, en los que ha utilizado en total 75 millones de toneladas de explosivos, se encuentra sin detonado.
Ha destacado que hay unos 7,5 millones de toneladas de explosivos sin detonar en las calles, terrenos, edificios residenciales y ruinas de las casas en diferentes partes de Gaza.
Al respecto, ha pedido a la comunidad internacional que envíe equipos especializados, de ingeniería y expertos en explosivos a Gaza para investigar esta cuestión y también equipar a los grupos técnicos y especializados presentes en Gaza con las instalaciones necesarias.
Israel ha recurrido a esta nueva fechoría para continuar el genocidio en Gaza, cuyos residentes se enfrentan a una hambruna severa como resultado de la guerra y un asedio inhumano.
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